Informar?

  Recuerdo que cuando descubrí mi asexualidad, quería gritarlo al mundo, contarle a mis amigos, a mi familia, a los medios, a quien sea. Quería que la humanidad reconozca y entienda que es una realidad. Me veía en un futuro como una activista, informando, incluso escribiendo un libro sobre el tema y desde mis experiencias.
  Pero ayer, meditando, mi visión cambió. Con el tiempo entendí que es algo increíble que mis amigos me apoyen o intentar ser la voz en alguna nota periodística, pero también me di cuenta que, después de todo, la asexualidad es tan sólo una forma más de vivir la sexualidad. Y de cierto modo, a quien le debe importar necesariamente si una persona es asexual o no, es a la pareja y es a ella (si llego a tener) a quien me voy a limitar a partir de ahora a hablar del tema. Obviamente si mis amigos tienen preguntas que hacerme o algo similar no me voy a negar a hablar, así como tampoco voy a dejar de escribir en este blog.
 La asexualidad después de todo, es una parte o aspecto más de la personalidad de uno, por lo que no es condicionante (me parece a mí) de la forma de ser en general de alguien.